Los efectos del Real Decreto Ley 1/2017 de medidas urgentes de protección de consumidores en materia de cláusulas suelo han sido mínimos y han dejado a todas las partes insatisfechas.
Los bancos recibieron una nueva oleada de reclamaciones tras la entrada en vigor de la norma, que además obligaba a implantar departamentos especializados de atención y mecanismo de información.
Los juzgados siguen colapsados con pleitos por lo que los afectados por las cláusulas suelo no obtuvieron una respuesta satisfactoria a sus reclamaciones o no deseaban esperar más para llegar a una solución.